Los niños, desde bebés, requieren gran volumen de espacio para almacenar artículos de higiene, juegos y ropa. Un armario con cajones para dormitorios de bebés, con una configuración versátil resulta, de lejos, la opción más asequible. Además de ser un elemento decorativo a la habitación, gracias a los cajones y puertas, es una solución de almacenamiento de los objetos que se utilizan con regularidad.
Muebles para el dormitorio del bebé: primero el almacenamiento
Los estilos a elegir son variados, que van desde el blanco, hasta diseños más elaborados. Las especificaciones de los acabados del mueble dependen de los gustos del cliente, aunque en la elección siempre debe pesar la capacidad de almacenaje.
El cajón en el dormitorio infantil es un aliado para organizar la ropa, y accesorios como pañales y juguetes. Los muebles dotados de cajones para dormitorios de bebés se pueden configurar adaptados a las características de la habitación. Además de la cuna, el dormitorio necesita tres muebles esenciales: un armario, una mesita de noche, y una cómoda.
La cómoda o la mesa de noche, o ambas, deben tener la altura suficiente para permitirte cambiar los pañales con comodidad. Considera que los bebés crecen rápido en los primeros meses de vida, y conviene que sean muebles robustos.
El dormitorio tiene que crecer con tus hijos. Por esta razón, resulta más práctico elegir los muebles con facilidad de configuración, al ritmo del cambio de los gustos y necesidades.
Una mesita de noche acabada en blanco, por ejemplo, resulta una opción más previsora que una mesita en madera de color rosa o azul claro. En el caso del tono blanco, basta elegir una combinación de dos o tres colores en otros muebles, cortinas o ropa de cama, para cambiar el aire de la habitación.
Durabilidad y seguridad de los muebles para niños
El mobiliario de la habitación del bebé tiene que cumplir características imprescindibles en cuanto a su robustez y seguridad. Piensa que, junto al mobiliario de cocina, los muebles de las habitaciones infantiles son los que reciben, en el buen sentido, mayor número de agresiones por parte de sus pequeños usuarios.
Los tableros laminados que se emplean en la fabricación de mobiliario cada vez incorporan menor cantidad e aldehído en su composición. El aldehído es un producto químico que se necesitaba, hasta ahora, como aglutinante de los residuos de madera que conforman los tableros, y poco a poco se liberan en el ambiente.
También existen tableros con cero emisiones de aldehídos u otros químicos contaminantes, que resultan perfectos para fabricación de mobiliario de dormitorios infantiles.
Otra característica del mueble fabricado con tablero de densidad media es su robustez. La composición del tablero, uniforme, aporta una resistencia que, a buen seguro, pondrá a prueba el niño cuando crezca.
Por otro lado, el DM se trabaja con facilidad, y se le pueden incorporar al mueble herrajes adecuados para el dormitorio del niño, así como cerraduras seguras para que el niño no acceda a los cajones donde almacenas el talco u otros productos de higiene.